El Soroche
Vaya con el Cusco. Nos ha recibido con una lluvia de mil pares de demonios. Ya lo esperábamos porque es la estación lluviosa, pero lo hemos notado más por el cambio desde el calorato de Piura.
El otro regalo ha sido el "mal de altura", soroche lo llaman. No es para tanto, mucho mito. Un poco de desazón hemos tenido, como si nos faltara el aliento, no más. Nos han dado un mate de muña en el hotel, dicen que ayuda a liberar los bronquios. Yo creo que te cuentan lo de soroche para darse pisto y para venderte los caramelitos de coca.
El Cusco, 17 de enero de 2015.