Otro Monfragüe: el rupestre y de las leyendas en Torrejón el Rubio
Pasar unos días en el Parque Nacional de Monfragüe es un lujo. Por cualquiera de las carreteras por la que accedas, te ves de pronto metida de lleno en un paraíso muy especial. Las rutas para caminar son a cuál más impresionantes y ese turismo silencioso, el de cámara y prismáticos, me encanta.
Pero... ¿y si llueve? Ese ha sido el caso de la última vez que hemos ido a Monfragüe. Este abril ha sido de lo más lluvioso y los días que hemos pasado en el parque no eran para hacer demasiadas caminatas. Así que hemos hecho otras actividades de las que no se suele hablar cuando se visita esta zona.
El centro de operaciones ha sido la Hospedería Parque de Monfragüe, de la Red de Hospederías de Extremadura (totalmente recomendable) que está a unos pocos kilómetros de Torrejón el Rubio. Se va caminando fácilmente al pueblo y allí encontramos unas actividades muy interesantes.
A unos metros de la Oficina de Turismo está el Centro de Interpretación del Arte Rupestre. Son un grupo de chozos donde pueden verse reproducciones de los restos que se han encontrado en la zona, que son muchos.
Se puede ver la recreación de una vivienda de la época neolitica, con todos sus cacharrinos, que seguro que a los pequeños les encanta. En otro te muestran los dibujos y las técnicas que usaban para pintarlos, poniendo todo en su contexto histórico. Realmente interesante.
Reprodución del interior de un chozo neolítico |
Materiales para hacer las pinturas |
Lo que más me gustó fueron las estelas decoradas. Bueno, son reproducciones, claro, que las originales están en el Museo de Cáceres. Sus grabados con la figura humana son una monada, aunque la del guerrero impone un poco. Y sobre todo, me gustó un montón el entusiasmo con que Laura, la guía, te enseña y te explica todo.
Reproducción de las estelas decoradas |
Guerrero en una estela decorada |
Estela con una figura humana |
Junto a los chozos están el Bird Center y el Obsevatorio Astronómico. El Bird Center no sólo es un lugar atractivo para los turistas pajareros tan de moda hoy en día, sino también un lugar de divulgación para los que no tenemos mucha idea del mundo de las aves. Con esta visita, llevas la lección aprendida para disfrutar mejor del parque.
Él Obsevatorio astronómico tiene cúpula de buen tamaño y un gran telescopio. Parece que Monfragüe es un excelente punto de observación del cielo nocturno. Cuando hemos estado, abril de 2016, tenían algún problema con una lente, que esperaban resolver en breve. Así que un motivo para volver a Torrejón el Rubio.
Y por último, lo más curioso. En la misma oficina de turismo hay un espacio llamado "Monfragüe, un destino de leyenda" donde en una serie de paneles y audiovisuales se recoge la tradición oral de la zona. Parte de estas leyendas "surgieron como historias que sirvieron para bautizar distintos puntos de la comarca": el Mito de la Serrana, el Fantasma de la Cava.... Muy curioso todo. Y me gustó saber que muchas de estas leyendas fueron recuperadas por maestros rurales en los colegios de la comarca.
No sé qué tipo de difusión se da a todo esto, pero creo que debe hacerse con un poco de más ahínco. Y desde luego, es una visita recomendada a las familias con niños y a los centros escolares.
Monfragüe, abril de 2016
Monfragüe, abril de 2016
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