En mi opinión no siempre se acierta al transformar edificios desocupados. Incluso se echan a perder sin que nadie intervenga. Pero el que hemos visto hoy en Lima me ha parecido de un acierto total, la Casa de la Literatura Peruana.
Se trata de una antigua estación de ferrocarril en semidesuso que ha sido transformada es biblioteca y centro cultural, donde se rinde homenaje a los personajes más destacados de la literatura peruana. Por supuesto con una megasección dedicada a Vargas Llosa.
Es un centro vivo donde se imparten montones de talleres, hay música y presentaciones de libros. Es un lugar agradable donde echar el rato.