Hoy, 24 de noviembre, se celebra en Portugal el Dia Nacional da Cultura Científica. Me parece una idea excepcional. En todas las escuelas se realizan experimentos científicos y exposiciones con los trabajos de grupo que hacen. En las principales ciudades del pais, hay coloquios y sesiones de divulgación científica para despertar en la población el interés por la ciencia.
Esto se celebra desde 1996 y viene a cuento porque tal día como hoy nació un tipo muy especial. En el mundo de la educación se le conoce por su nombre real, Rómulo de Carvalho. Fue profesor de Física y Química en el Liceu Camões y un entusiasta divulgador de la ciencia.
Pero a mí me gusta casi más su otra mitad, la mitad poeta; como poeta fue António Gedeão y adoro su Piedra Filosofal. Son esos versos que te hacen sentir bien y con ganar de vivir. Te hacen pensar que hasta llegar donde estamos muchos hombres y mujeres han hecho grandes cosas…
¡Y qué decir de la maravillosa versión que de este poema hizo Manuel Freire…! No me canso de escucharla. Estos últimos versos me emocionan: son ciencia, sentimiento, lucha y esperanza:
Eles não sabem nem sonham
Que o sonho comanda a vida
E que sempre que um homem sonha
O mundo pula e avança
Como bola colorida
Entre as mãos de uma criança.
Pilar Otano Cabo
Badajoz, 24 de noviembre de 2020